Dimensiones | Ámbitos |
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Enfoque Territorial | Definición de establecimiento rural |
Relaciones escuela – territorio | |
Gestión Institucional | Redes y microcentros |
Liderazgo | |
Trayectorias educativas | |
Gestión Pedagógica | Trayectorias formativas |
Gestión curricular | |
Contextualización curricular | |
Docencia | |
Convivencia | |
Recursos pedagógicos | |
Condiciones Estructurales | Disponibilidad y acceso a bienes y servicios básicos |
Aspectos institucionales (financiamiento, condiciones laborales y arquitectura institucional) |
Enfoque Territorial
Las definiciones institucionales en uso invisibilizan las particularidades y la diversidad de “ruralidades” que existen en el país. Para responder adecuadamente a las necesidades de las comunidades educativas e impulsar su desarrollo, se necesita una política de Estado que tenga un enfoque territorial y participativo.
Gestión Institucional
Los microcentros son espacios de diálogo y reflexión pedagógica centrales para la educación rural. Faltan recursos para apoyar su labor, ampliar las redes territoriales de la comunidad escolar y fortalecer los equipos de trabajo. Es importante mejorar las oportunidades educativas que ofrecen los territorios rurales para facilitar la continuidad de las trayectorias educativas de las y los estudiantes.
Gestión Pedagógica
El docente rural tiene un perfil comunitario, caracterizado por el compromiso ético, afectivo y profesional con su labor y su territorio. La escuela se percibe como un espacio cercano y familiar, lo que contribuye a mantener una buena convivencia. En este contexto, el carácter “urbanocéntrico” del currículum no resulta pertinente para la educación rural multigrado. Se necesitan más recursos económicos y humanos para abordar los desafíos pedagógicos, sociales y educativos que enfrentan los establecimientos.
Condiciones Estructurales
La escuela rural está en una situación de desventaja y desigualdad en relación con las escuelas urbanas. La educación rural está subrepresentada en la organización del Ministerio de Educación, los recursos económicos e incentivos para las y los docentes resultan muy insuficientes y, además, existen falencias importantes de conectividad vial y digital, transporte escolar, infraestructura y acceso estable a los servicios básicos (agua, electricidad e internet).
Mesas Locales (regionales):
La frase más utilizada en este grupo es ‘contar con o tener más recursos’. Esto se vincula en orden de frecuencia o relevancia con: apoyo administrativo, equipamiento, apoyos para promover el aprendizaje, etc. En términos generales, los y las participantes convergen en la necesidad de contar con estos recursos para poder lograr una mejor distribución del tiempo entre sus tareas de docencia en el aula, administración y preparación de clases, entre otras. Si bien tiene una menor frecuencia, se menciona también la necesidad de mayores oportunidades de desarrollo profesional.
Respetar tiempos libres de los docentes (recreos), [contar con] espacios para planificación material didáctico pedagógico, participación acorde del centro de padres y apoderados en diversas instancias y tener un equipo multidisciplinario con interacción directa con los estudiantes que permita un trabajo en conjunto con los docentes.
En este estamento, el perfil del docente rural está relacionado a un conjunto de capacidades, entre las cuales la más importante es la del compromiso (como un valor personal y profesional), seguida por la pedagogía (como saber o habilidad) y la empatía (como valor personal y profesional).
Estas capacidades se deben entender principalmente en el contexto de aplicación de un aula multigrado, teniendo en cuenta el rol social y el impacto local de la labor del docente rural.
Para los y las participantes es fundamental considerar los distintos estilos de aprendizaje, necesidades e intereses de los estudiantes, como antecedente para crear experiencias de aprendizajes significativos para ellos. Entre las prácticas pedagógicas útiles para generar estos aprendizajes significativos se mencionan, ‘el trabajo colaborativo’ y ‘la necesidad de llegar a acuerdos entre los distintos actores de la escuela (directivos, docentes, estudiantes, padres, madres y apoderados)’, por ejemplo, en lo que respecta a los contenidos relevantes, los objetivos sugeridos en el currículum y las actividades pedagógicas.
La esencia de nuestro enfoque radica en la adaptación de las actividades escolares a escenarios de aprendizaje auténticos que involucren activamente el entorno y los intereses de los niños y niñas.
Los y las participantes sostienen que el principal desafío es la necesaria implementación de la educación preescolar. En segundo lugar, se refieren a los problemas presentes en el nivel básico, por ejemplo, falta de recursos, dificultades para atender adecuadamente a estudiantes con necesidades educativas especiales, mediciones estandarizadas que no consideran las particularidades de la educación rural, entre otros. También se menciona la necesidad de generar procesos de articulación entre diferentes estamentos, niveles educativos e instituciones del entorno de los establecimientos educacionales. Como oportunidades se menciona la posibilidad que brinda el contexto multigrado de ofrecer un aprendizaje más personalizado y la flexibilidad o adaptabilidad curricular. Con relación a la forma de enfrentar estos desafíos y oportunidades la mayoría coincide en que es necesario contar con los recursos humanos y materiales adecuados.
La verdad es que más que oportunidades son más desafíos, ya que la enseñanza de los estudiantes inicia en primer año básico, todos los estudiantes llegan sin su enseñanza prebásica, es una carrera contra el tiempo, porque al momento de ser evaluados con los instrumentos estandarizados a nivel nacional estamos en desventaja, es ahí donde no se cumple la igualdad de condiciones.
En general, los y las participantes tienen una evaluación positiva de la convivencia en los establecimientos rurales. La mención de frases como ‘buena convivencia’ o ‘buen trato’ son las más frecuentes para referirse a esta temática. Asimismo, el concepto de respeto, aparece como un valor fundamental para regular la convivencia entre todos los miembros de la comunidad escolar. Desde su perspectiva, el afrontamiento de los problemas de convivencia escolar debe realizarse como comunidad educativa, pues no se reduce a un tema individual (personal) o un conflicto entre individuos.
La convivencia escolar en las escuelas rurales se basa en los principios básicos de la comunicación, respeto por la opinión ajena, diversidad, empatía y compromiso con el buen trato. Debido a que la escuela cuenta con baja población escolar y reducido grupo de apoderados, se logra fortalecer vínculos sociales entre los diferentes estamentos de la comunidad educativa.
Existe coincidencia entre los y las participantes en que se necesita ‘contar con (más o mayores) recursos’, tanto ‘tecnológicos’ (computadores, proyectores, tablets) como ‘económicos’ (para adquirir o producir material didáctico y para mejorar laboratorios, invernaderos y visitas pedagógicas). Se mencionan diferentes herramientas o recursos de apoyo a los aprendizajes, tales como textos escolares de calidad, acceso a internet, un entorno agradable y salas mejor equipadas, entre los más mencionados. Asimismo, se reafirma la necesidad de que los recursos didácticos o material pedagógico sean cultural, territorial y lingüísticamente pertinentes.
Recursos como excursiones, experimentación, el uso sistemático de la lengua kunza por toda la comunidad educativa y la adhesión a la cultura local, así como la incorporación de herramientas digitales, pueden ser fundamentales para garantizar una pedagogía rural efectiva y relevante.